Fue mi marido el que las hizo por primera vez en casa, me acuerdo perfectamente del día. Lucía acababa de nacer y yo, después de pasar unos días muy malos por una cefalea post-punción debido a la epidural (ya os contaré mi experiencia en otro post), ya veía por fin la luz, me encontraba mejor y para celebrar que todo volvía a la normalidad, Sergio me hizo estas palmeritas. Tengo un sol de marido!!
Ingredientes:
Masa de hojaldre fresco
Azúcar
Elaboración:
Os lo explico por pasos:
1. Espolvoreamos la encimera con azúcar, abundante, porque es lo único que llevan las palmeritas y lo que les da gracia.
2. Estiramos nuestra masa de hojaldre y volvemos a espolvorear con azúcar. Pasamos un rodillo por encima, para que el azúcar se adhiera bien a la masa.
3. Doblamos los dos extremos de la masa hacia el centro (que coincida el borde en el centro).
4. De nuevo, doblamos cada extremo de la masa por la mitad
5. Y otra vez por la mitad. Una vez la tengamos ya así, es cuando procedemos a cortarla con la ayuda de un cuchillo bien afilado, en porciones de 1 cm cada uno aproximadamente.
6. Por último colocamos sobre el papel de horno nuestras palmeritas. Importante: ponerlas un poquito separadas ente ellas, porque en el horno se expanden bastante y chocarían unas con otras, se pegarían.
7. Las metemos en el horno, que habremos precalentado a 210º, durante unos 15-20 minutos hasta que comiencen a dorarse.